Descripción

El Cerro Blanco, ubicado en la comuna de recoleta, corresponde geológicamente a un “cerro isla”, formación de relieve típica de la cuenca central de Chile. Nace de la cordillera de Los Andes, como extensión del Cerro San Cristóbal, separada del macizo cordillerano por una quebrada que se fue rellenando con sedimentos a lo largo del tiempo, hasta aislar al Cerro Blanco. Históricamente, el Cerro Blanco ha tendido gran importancia desde la época precolombina, cuando era conocido como Huechuraba o “lugar de greda”. Los pueblos originarios, quechuas y picunches, le asignaron una connotación religiosa, empleándolo como centro ceremonial. Uno de los principales vestigios de la presencia indígena en el cerro, es un complejo de piedras tacitas ubicado en su ladera norte, considerado el mayor ejemplo de este tipo en toda América. Tras la llegada de los españoles y la fundación de Santiago en 1541, el cerro quedó en propiedad de Inés de Suárez, quien mandó a edificar una eremita en la cima, dedicada a la adoración de la Virgen de Montserrat.

Al morir Inés de Suárez, los terrenos fueron donados a la Orden Dominica, que construyó una pequeña capilla a los pies del cerro, en reemplazo de la eremita ya destruida. Durante el resto de la colonia, y especialmente en el siglo XVIII el cerro fue utilizado como cantera, para obtener la piedra blanca con la que se construyeron importantes obras de la capital como el puente Cal y Canto y el Palacio de la Moneda. Con el correr de los años, el cerro fue integrándose a la ciudad gracias a la expansión de zonas urbanizadas. Un hito importante en este sentido, fue la construcción del Cementerio General al norte del Cerro Blanco, en la segunda década del siglo XIX. Ya en el siglo XX, la zona de Recoleta acogió a familias de sectores medios y obreros, instalándose en las laderas del cerro una población callampa a partir de 1930 que sería erradicada años más tarde. El Cerro Blanco, fue declarado Zona Típica en 1990, ante la necesidad de preservar su patrimonio histórico y cultural, que da cuenta del desarrollo de la zona central y de la ciudad de Santiago a lo largo de los años. En esta Zona Típica se preserva el Monumento Arqueológico de las Piedra Tacitas y el Monumento Histórico Iglesia de la Viñita. Actualmente, el Cerro Blanco es administrado por el Parque Metropolitano y cuenta con habilitación para el acceso de la comunidad, así como con una parte cedida a comunidades indígenas en la que se creó el Centro Ceremonial mapuche Apu Wechuraba, además de un ceremonial Aymara.