Descripción

En 1923 se funda en Concepción el Instituto Literario, origen del actual Liceo de Hombres Enrique Molina Garmendia, uno de los más tradicionales de la ciudad y de la región. Este Liceo está ubicado en el sector fundacional de Concepción y fue diseñado por el arquitecto chileno Onofre Montané Urrejola. Por las grandes dimensiones del edificio, se creía que en este lugar funcionaría una Universidad, lo que no sucede pues finalmente la Universidad de Concepción sería fundada en otro sector de la ciudad. Terminada su construcción en 1920, se detectó la necesidad de contar con un Salón de Actos que recogiera las actividades oficiales y artísticas, tanto del Liceo como de la comunidad penquista.

Es así como entre 1929 y 1935 se construye el Teatro del Liceo Enrique Molina, espacio que queda inserto dentro del establecimiento, en el sector central de la manzana, sin presencia desde la calle. A partir de su edificación el inmueble albergó diversas actividades culturales. Durante su mejor época fue sede de destacadas obras, y su oferta de espectáculos solo podría ser comparable con la que entonces ofrecía el Teatro Municipal de Concepción. También fue en sus escenarios donde se formaron destacados actores nacionales. Luego del terremoto de 1960 el Liceo fue demolido y la única estructura que se mantiene en pie son a las ruinas del Teatro.

Con ello quedaron al descubierto para la comunidad las escaleras, el auditorio del Teatro y toda su estructura principal, las que hoy son visibles desde la calle. Su ubicación es privilegiada, pues por estar en pleno sector fundacional, se encuentra cercana a importantes instituciones como la Biblioteca Municipal, el edificio actual del Liceo y el Parque Ecuador, lo que le otorga un amplio espacio de antesala y mayor visión desde lugares alejados. La conservación de sus ruinas ha sido posible por el cierre perimetral del terreno donde se ubica. El edificio del Liceo Enrique Molina responde al estilo neoclásico, con una volumetría monumental con profusos elementos decorativos. Su estructura es de gruesos muros de albañilería de ladrillo trabada y reforzada. El Teatro del Liceo Enrique Molina es un testimonio material del patrimonio histórico de la ciudad y se constituye hoy como un referente identitario para los habitantes de Concepción.